Cumplimos objetivos lo poco que nos dejó la semana santa. Fuimos a por nuestra dosis de paz mental a las tachuelas arriba mencionadas. La primera es una montaña muy estética que desde que la vi por primera vez en una revista de Pirenaica siempre quise subir. La segunda la conocí gracias a un senderista que me crucé una vez llegando a Cuello Arenas, es un mirador increíble a Los Tres Sorores, a Las Tres Marías y al Cañón De Añisclo. Nos alojamos en Escalona, Casa Vispe, muy, muy recomendable. También visitamos Ainsa, no dejéis de ir al geo-museo, donde te muestran cómo de convulso fue en el pasado esta comarca del Sobrarbe, muy chulo. Nos queda pendiente para la próxima la Peña Montañesa, un montañón.
Castillo MayorLos Tres Sorores y Las Tres Maríasllegando al MondotoCima Mondoto, Cañón AñiscloPeña Montañesa desde PuértolasPuértolas, donde se aparca para subir al Castillo MayorEmpezandoSestrales, subiendoEl boj es lo que más abundaAntes de llegar al Castillo Mayor hay un gran valle suspendido a 1.800mZona Kárstica llegando al finalNos observanCimaCastillo MayorBuscando cimasBestuéCastillo Mayor desde Nerín, inicio de la ruta hacia el MondotoSubiendo al Mondoto, Las Tres MaríasLos Tres Sorores y el CilindroRepito foto de cimaCastillo Mayor al fondo desde MondotoPeña MontañesaAinsa desde El geo-museo
Jueves un tanto atípico. Normalmente estos días no me suelen dar para mucho, esta vez y debido al escaso trabajo pude escaparme con Alberto a Aralar. Por la mañana paseíllo y por la tarde a trabajar un poco. Dejamos el coche un poco más arriba del parking que se toma para enlazar mediante un puente al camino de minas de Amezketa. Esta vez no subimos por ahí, tomamos una pista que te deja justo encima de minas. A partir de ese punto el camino es el GR que te lleva a Igaratza, como siempre hay que desviarse a la derecha hacia las bordas de Padelus, ahí había bastante nieve, pero muy transitable hasta el collado de Lizaso, desde aquí se tiene la opción de ir al Gambo o al Pardarri, nosotros escogimos esta última. Fue una gran jornada de montaña.
El agua, la gran protagonistaEsta foto me recuerda al PiriEn PardelusGambo desde el collado de LizasoBuzónFabricamos brújula con un palito y su sombraGamboMalloakNuestro compi, este si que sube…
Nos desplazamos el fin semana a la localidad salmantina de Vilvestre.
El motivo era realizar la marcha popular que anualmente el segundo domingo de marzo se organiza para conocer su entorno, esta fue su XXVI edición. El recorrido transcurre por sendas y caminos variados y siempre finaliza en el embarcadero del río, ahí te reciben con una suculenta comida en la que además te puede tocar un paseo en barco.
Eso fue el domingo, el sábado estuvimos «entrenando» visitando varios de los miradores que están construidos para divisar la presa de Aldeadávila desde diversos puntos. Muy bonito todo.
A la luz de la lunaNocturna, Orión en el centroEmbarcaderoPanorámica de VilvestrePresa de AldeadávilaDesde el castilloColmenasEn un punto del recorridoAlcornoqueAlmendreraPalomar en PortugalCasi terminandoMuchas chumberas y olivos
El domingo nos acercamos al pueblo de Arano para desde allí dirigirnos hacia Mandoegi. Esta vez escogimos una ruta alternativa mucho más bonita que la que transcurre por la pista habitual. En este recorrido hasta el collado de Errekalko pudimos visitar numerosos asentamientos prehistóricos donde hay gran abundancia de crómlech. También se pasa por las cimas de Aranomendi y Arriurdingain, las vista son espectaculares hacia todos los lados, se divisa el pequeño circo a los pies del Mandoegi donde te haces a la idea de lo que te queda todavía. Después del collado de Errekalko se continua por un sendero bien marcado en azul y amarillo hasta la cima de Mandoegi. El camino de vuelta hasta el collado es el mismo, luego desde ahí nosotros lo variamos un poco tomando la pista que va a Goizueta, en un punto determinado hay que girar al oeste para retornar al camino que te lleva a Arano.
Ayer sábado volvimos a visitar este entorno que siempre te sorprende con algo nuevo.
En principio la idea era subiendo por minas alcanzar la cima de Elizkaitz y retornar cresteando algunas más. Al final lo alargamos un poco y después de pasar por Egutegi fuimos a Beoain, para ya volver por Uakorri y Artubi. Hicimos una incursión hacia el Balerdi para ver su entretenida arista donde suele haber desgraciadamente algunos accidentes fatales. Yo ya la he hecho unas cuantas veces y mi compañero de fatigas tenía ganas de verla, en ningún momento nos plantemos cruzarla, la roca está pulida y en esta ocasión estaba con barrillo, muy, muy peligroso, aquí solo te resbalas una vez. A su alrededor observamos una numerosísima bandada de buitres, nos impresionaron bastante. Ya bajando vimos merodeando el helicóptero por la zona del Txindoki, hoy he visto en las noticias que se había accidentado una mujer, afortunadamente nada grave.
Nos hemos acercado una vez más a Aralar para visitar el Ganbo.
El recorrido de subida y de bajada ha sido el mismo, aunque en el desvió del GR hacia el collado de Lizaso, entre Putxerri y Ganbo ha variado un poco, nos adaptamos a las condiciones de la nieve. En la sombra estaba dura como el cristal y en la parte soleada te hundías hasta la cintura. Aprovechamos la parte helada para subir asumiendo un poco de riesgo y bajamos por la soleada, echamos unas risas de vez en cuando, te hundías hasta la cintura y en alguna ocasión yo no podía sacar los pies (risas).
El sábado pudimos encontrar uno de los lugares más bonitos y sorprendentes de Gipuzkoa.
Se trata de la zona conocida como Labetxu, su parte más bonita está pegada a la costa y hay que aprovechar la marea baja para poder verla en todo su esplendor. Es una excursión fácil, nosotros partimos del parking del antiguo parador, aunque se puede bajar de más sitios. Fue una mañanera sencilla de tres horas más o menos, donde se pasa buena parte del tiempo haciendo fotos aquí y allá. La parte de abajo y la subida la compartimos con unas hermanas muy simpáticas de Zarautz, gracias a ellas yo también salgo en alguna foto. Os dejo mi recorrido.
Nos fuimos a Bizkaia esta vez. El objetivo el Alluitz desde las canteras de Atxarte. Nos juntamos esta vez mi cuñado, su hermana y el que escribe, menudas máquinas los hermanos estos…
La subida esta muy bien marcada y no tiene ningún problema, salvo el desnivel superado en tan pocos metros.
La montaña es un gran balcón hacia las tres provincias, en un día despejado como el que nos tocó se tienen unas grandes vistas.
Nos acercamos una vez más al pirineo, en concreto nos alojamos en la Casa Taconera en Ansó, pueblo por cierto muy bonito con variedad de bares y restaurantes. Nos tocó una habitación impresionante con vistas a la montaña.
Tienes la opción de elegir el desayuno dulce (6€) o salado (8€), nosotros optamos por el dulce, variedad y cantidad, muy bien.
El sábado nuestra intención era hacer circular con la cima de Peña Ezkaurre, pero al final no lo vi claro y subimos y bajamos por el mismo lado. Tengo que decir que el cuestón es de los que no se olvidaran fácilmente, la primera parte transcurre por el bosque y la segunda por una de las laderas, está bastante descompuesta, no tiene peligro, pero alguna vez hay que echar las manos. Las fotos como siempre no expresan el auténtico desnivel que hay. Las vista a todos los lados muy chulas.
El domingo ya salimos con la intención de hacerle una circular al Petretxema si o si. La subida la hicimos por el collado de Linza, esta parte fue la más dura por el calor que hacía, luego ahí ya entraba el aire y la cosa fue más llevadera, desde allí se ve el objetivo, que parece cerca pero engaña. En la cima hay una bajada hacia el collado de Ansó muy pronunciada, ahí se enlaza con la senda S-3 hacia Linza, perfectamente marcada en verde y amarillo, solo queda andar y andar y andar……
Una vez más nos acercamos al Moncayo, esta vez fue con el C.V.C. Nos juntamos 35 senderistas. Estuvo Dani como guía de montaña y responsable de la excursión, nos acompañaron también unos amigos de la cuadrilla, que bien que algunos se animaran a realizar dicha actividad. La subida fue una circular partiendo de la Fuente De Los Frailes. No tiene ninguna dificultad salvo el desnivel acumulado, que por cierto a algun@ se le atragantó un poco.